domingo, 18 de octubre de 2015

¿...Y LA REELECCIÓN DE LOS CONGRESISTAS?



El congreso nacional ha aprobado mediante la Ley No 30305, la no reelección de los alcaldes, regidores, presidentes (ahora denominados gobernadores), vicepresidentes y consejeros regionales respectivamente, esta decisión es buena, sin embargo,  los congresistas y el ejecutivo se olvidaron de la reelección del legislativo, obviamente esta omisión no es casual, sino intencional, ya que lo que se pretende es mantener la cuestionada reelección de los congresistas.
Uno de los principales argumentos que justifica la decisión de la no reelección de autoridades regionales y locales es la lucha contra la corrupción, en este aspecto la frase "toda reelección es sinónimo de corrupción" se hace verbo,  debido a que muchas autoridades reelectas han sido cuestionadas justamente por dicha causal, sin embargo han logrado ganar las elecciones, esto no hubiera sido posible si es que no utilizaban los fondos y logística públicas, lo que les da gran ventaja, frente a los demás candidatos y así se mantienen en los cargos. Un argumento a favor de la reelección es que la experiencia de los ganadores se desperdicia,  ya que los nuevos que entran tienen que aprender los primeros meses para luego recién  hacer obras y trabajar, no basta llevar unos cursos de capacitación, sino tener experiencia, dicen los defensores de la reelección de autoridades locales y regionales.
El cambio de autoridades es muy importante, por ello estoy de acuerdo que se prohíba la reelección inmediata de las autoridades regionales y locales, esto no significa que ya no se use los fondos públicos para apoyar a algún candidato, porque las autoridades electas apoyarán y de hecho ya han apoyado a su lista preferida, no sólo moralmente, sino también con logística estatal, esta es una enfermedad que difícilmente se va a superar; ello se ha visto en autoridades que por diversos motivos ya no han podido ir a la reelección.
Por otro lado, hacer obras de envergadura  en cuatro años es insuficiente, por ello concuerdo con los representantes de los gobiernos locales, cuando refieren  que el mandato debe extenderse de cinco años, sin reelección inmediata, o sea un año más de gestión local y regional.
Pero hay algo fundamental que nuestros parlamentarios (los muy populares otorongos) no debatieron, tampoco lo aprobaron: su propia no reelección, esto ha sido y es muy enojoso para las grandes mayorías, debido a que existen congresistas tan ineptos que mejor sería que no tengan ninguna posibilidad de presentarse a la reelección, es decir es de suma urgencia prohibir la reelección de los congresistas, debido a que lo que han hecho es recomendar a sus hermanos al programa Devida, es decir cometer tráfico de influencias, no sólo en dicha institución sino también en COFOPRI, Registros Públicos, Dirección Regional de Cultura, duplicarse el sueldo, etc.  
Pero si se prohíbe la elección de los congresistas, ¿se desperdiciaría la abundante experiencia  de  los congresistas? Claro, ¡el Perú se perjudicaría y seríamos un país más atrasado! ¡obvio, eso no lo podemos permitir y  por ello los congresistas deben ser reelegidos!, ¡claro que no!, ¡no es así!, en efecto, existen algunos congresistas que deben ser reelegidos (ninguno es de Ancash), pero no todos, uno de los muy buenos congresistas, es Lescano, quien sí debería ser reelegido, pero no solamente existen poquísimos buenos congresistas, también existen poquísimas buenas autoridades regionales y locales, por lo que también deberían ser reelegidos; en resumen, la excepción no hace la regla,  y por tanto, para tristeza de los legisladores, debo afirmar categóricamente que  no se debe permitir la reelección de congresistas, porque lamentablemente, han demostrado, su total ineficiencia y falta de respeto al país, a la democracia y a los derechos humanos. 
En conclusión, el Perú, no pierde nada, con la prohibición de la reelección de los congresistas, por el contrario, el Perú gana, porque nueva gente entrará con ímpetu y realizará mínimamente reformas que beneficien a los ciudadanos, ciudadanas y al país.   Entonces es una criollada estúpida  y corrupta de los congresistas no haber aprobado la prohibición de la reelección de ellos mismos, justamente estas actitudes despreciables, provocan el descontento y el rechazo de la población en contra de los congresistas. Se espera una inmediata prohibición de la reelección para los congresistas, aunque en este extremo también se hace verbo la frase popular “otorongo no come otorongo”, seguramente en su inflada  autoestima, el legislador piensa que son insustituibles e imprescindibles y que sin ellos el Perú no avanza, nada más falso.

                                           Publicado en la Revista Actualidad Ancash, el mes de Octubre del 2015.